Ser cliente de esta abogada es lo mejor que les ha podido pasar a estos dos presos que están en la cárcel por culpa de esta abogada tan torpe. Aunque esto es lo que ocurre cuando esta guarra siempre acaba pensando con las tetas en vez de con la cabeza, en cierto modo están de suerte estos dos presos porque esta abogada siempre regala sexo a todos los clientes a los que meten en la cárcel por su culpa.
Os aseguro que es todo un espectáculo ver el cuerpazo de esta guarra con estos dos presos que van a poder follársela. Poneros cómodos y disfrutad de esta rubia de melones enormes que se va a liar a comer rabos, eso sí, a ella le encanta mandar y le va a decir a sus dos nuevos perros todo lo que tienen que hacer para poder correrse encima de sus tetas bonitas.